La presidenta Claudia Sheinbaum ha marcado un hito histórico en México al promover la igualdad de género incluso en los actos más tradicionales y masculinos, como las salutaciones militares. En un gesto sin precedentes, los jefes de las Fuerzas Armadas y la Marina han rendido honores a la "comandanta suprema", como se autodenomina la presidenta. Tanto el almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles como el general Ricardo Trevilla Trejo han expresado su apoyo a la presencia de las mujeres en la tropa y su ascenso en la jerarquía militar. La ciudadanía se muestra perpleja y entusiasmada al ver a los altos uniformados saludar con respeto a una mujer al mando del país. "Bajo su mando, navegaremos juntos", declamó Morales Ángeles. La solemnidad y el simbolismo de la ceremonia eclipsaron las nuevas medidas presentadas por Sheinbaum para el bienestar de las mujeres mexicanas.
Sumergimos a la gente en su propio pastel de cumpleaños y nos hacemos 'limpias' con un huevo. 1. Mover el dedo de arriba a abajo para decir que sí. Televisa En México basta ver esta señal para saber que estamos en lo correcto o que tenemos aprobación, pero en cualquier otro lugar del mundo es un simple dedo moviéndose sin sentido. 2. Poner comida en los altares de Día de Muertos. instagram.com Es imposible explicar esta tradición sin que piensen que estamos locos. O sea, la comida no es para los vivos, sino para los muertos que vienen en la madrugada a comérsela, pero sin desaparecerla, porque sólo se comen su esencia. ⁀⊙﹏☉⁀ 3. Llamarles "dulces" a cosas que no tienen nada de dulce y mucho de picante. instagram.com ¿Por qué les seguimos llamando dulces si tienen chamoy y chile de árbol? Nunca lo sabremos. Lo cierto es que "regálame un dulce" es una de las frases más peligrosas que