
En un intenso debate celebrado en Filadelfia, Donald Trump y Kamala Harris se enfrentaron sin concesiones en los principales temas de campaña: economía, inmigración, aborto, delincuencia y respeto por la democracia. Fue un enfrentamiento vibrante y tenso, donde la demócrata logró cuestionar la idoneidad de Trump para el cargo. Harris proclamó que "es hora de pasar la página" y logró acorralar al expresidente con sus críticas a su gestión y carácter. Trump se vio obligado a defenderse de los ataques, llegando a ser corregido por los moderadores en varias ocasiones. Como colofón, Harris recibió el apoyo de la cantante Taylor Swift al final del debate, quien pidió el voto para ella.