Cada mañana, Yazmín experimenta una sensación inquietante en su pecho al comenzar su jornada laboral. Mientras su hija se queda en casa, decide no llevarla a la escuela por motivos de seguridad. A pesar de sentirse angustiada por la incertidumbre de si volverá a ver a su hija, se dirige al trabajo sin derramar una lágrima. Como funcionaria del Gobierno, se enfrenta a la presión de no poder faltar al trabajo, a pesar de la falta de protección y apoyo. Con un seguro de vida de menos de 100.000 pesos, se cuestiona qué dejará a su pequeña en caso de cualquier eventualidad. Esta es la cruda realidad que enfrenta Yazmín, cuya identidad se mantiene en anonimato.
La rivalidad entre facciones del Cartel de Sinaloa se ha expandido a varios Estados de la frontera norte, donde Los Chapitos y el grupo liderado por El Mayo Flaco, hijo de El Mayo Zambada, controlaban el lucrativo negocio del tráfico de drogas sintéticas hacia Estados Unidos. Este conflicto ha generado gran agitación en el mundo del narcotráfico en México, sembrando el temor entre la población ante la posibilidad de nuevos enfrentamientos en lugares como Sonora, Baja California, Chihuahua y Durango. "Las calles lucen desoladas y los negocios cierran temprano", comenta Eduardo López, reconocido periodista de Ciudad Obregón, ubicada al sur de Sonora y una de las ciudades con mayor índice de homicidios en el país. La inseguridad se ha apoderado de la región, generando un clima de tensión y temor entre sus habitantes.