La elección de Claudia Sheinbaum como la primera mujer presidenta de México en 200 años ha generado un gran impacto en el movimiento feminista. Con experiencias diversas con otras líderes mundiales, las feministas mexicanas reciben a Sheinbaum con entusiasmo y cautela.
Las expectativas son altas, especialmente con los primeros anuncios de la presidenta electa. La atención prioritaria al sistema nacional de cuidados para jornaleras y maquiladoras, así como las pensiones para mujeres de 60 a 64 años, son pasos importantes para abordar la discriminación y desigualdad que enfrentan las mujeres más vulnerables.
El anuncio más significativo, sin embargo, es la creación de la Secretaría de la Mujer, con Citlalli Hernández como titular. Esta nueva secretaría tendrá el mismo rango que otras secretarías del gabinete, lo que demuestra un compromiso real con la igualdad de género en el gobierno.