
Estados Unidos respalda a su embajador en México, Ken Salazar, a pesar de la controversia generada por sus comentarios sobre la reforma judicial y la reciente "pausa diplomática" anunciada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en respuesta a lo que consideró una actitud injerencista. Brian A. Nichols, subsecretario para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, reafirmó el profundo respeto de Washington hacia la soberanía de México, respaldando las declaraciones de Salazar sobre el riesgo que implica la elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte por voto popular. Nichols señaló que, como socios y amigos, comparten preocupaciones sobre las reformas constitucionales propuestas. A pesar de la aclaración del presidente mexicano en La Mañanera, afirmando que la "pausa" solo aplica a la Embajada estadounidense y que las relaciones bilaterales continúan, la Casa Blanca ha dejado claro que su oposición a la propuesta de ley va más allá de un posicionamiento individual y es compartida por todo su cuerpo diplomático.